Nos suele ocurrir que a veces
Damos tumbos por la vida
Nuestro caminar pausado
Es lento y aletargado
Y por más que lo intentamos
  Da la impresión que no avanzamos
  Parece que vamos arrastrando
  Nuestros pasos por la vida,
  Nos acoge la angustia
  Nos persigue la congoja
Y ahí vamos estribando
A cuestas y cargando
Una eterna paradoja,
Culpable contradicción
Que nos causa aflicción
  Son los pesos muertos
  Nuestros errores aparentes
  Evidentes y encubiertos
  Lastres enquistados
  Costras sangrantes
Recuerdos del pasado
De pesado resultado
Son cargas sobre la espalda
Que nuestra conciencia resalta
Son eternas cicatrices
  Nuestra felicidad postergada
  Una vida desperdiciada
  Mientras el reloj inexorable
  Del tiempo agotable
  Marca el punto final
Es menester inevitable
Reconocer sin discusión
Que nos detiene y nos retrae
Que nos bota y nos decae
A esta triste situación
  Son los pesos muertos de la vida
  Todos tenemos más de uno
  En cualquier medida
  Todos cargamos más de alguno
  De causa conocida
Bájalo y acomódalo
En una orilla del camino
Puede parecer anómalo
Pero mejor abandónalo
Déjalo a su destino
  No tienes por qué cargar con él
  No debes tragar su hiel
  Que te envenena y enloquece
  Y no te pertenece
  Es propiedad del pasado
Reconócelos ahora
En esta buena hora
Son los pesos muertos de la vida
Dale cruz y sepultura
Que abandonen tu locura
  Libérate de tus lastres
  Y que nunca arrastres
  Culpas que no son tuyas
  Y abandónalas al pasado
  Donde siempre debieron haber estado.